martes, 3 de junio de 2014

“Constantine 2”, de Guy Fawkes, Jeff Lemire, Renato Guedes, Aco y Szymon Kudranski.




ECC Ediciones publica la segunda entrega de “Constantine”, el remozado “Hellblazer” del NUDC que rebaja un escalón el tono crítico, atormentado y sinvergüenza del anterior volumen en pos a una mayor espectacularidad y la incorporación del personaje en el universo superhoeroico. Sin embargo, si el modelo es este, que se recoge los números seis a ocho de la serie original norteamericana, algo está profundamente equivocado en el nuevo enfoque sin para hacerlo evolucionar han de hacer tabula rasa con todo lo desarrollado durante décadas anteriroes .

En esta nueva entrega, Constantine sigue inmerso en su batalla contra la Secta de la Llama Fría y lleva las de perder. Constantine está en las últimas tras  recibir la paliza de su vida y se encuentra a expensas de la Secta que le ha robado todos sus artilugios mágicos quedando prácticamente indefenso. Sin embargo, cuando las cosas pintan peor una inesperada aliada da una nueva oportunidad al mago de Liverpool para volver las tornas a su favor.

Tras el mal gesto de birlarnos el número 5 de la serie norteamericana de “Constantine” en la colección española de la “Liga de la Justicia” por tratarse de un cruce con el megacrossover deLa Guerra de la Trinidadlo más interesante que sucede en estos números es asistir al relevo definitivo de Lemire por Fawkes en los guiones en unas tramas centradas básicamente en desarrollar el enfrentamiento de Constantine con la Secta de la Llama Fría, cuyos líderes se antojan como los principales adversarios de Constantine en esta nueva etapa. Un elemento ajeno a una historia que en estos números no parece ir hacia ningún sitio y limitarse en cubrir la obligada periodicidad.

En el apartado gráfico, el baile de dibujantes es total, dibujando cada uno de los tres episodios yanquis un dibujante distinto con la confusión que ello conlleva a la hora de desarrollar un proyecto a largo plazo. No se puede decir que ninguno de los tres dibujantes lo hagan mal pero se nota que estamos ante meros trabajos alimenticios y que su implicación con la serie es escasa, limitándose meramente en acabar los encargos con profesionalidad.

En fin, DC debería tomarse más en serio el trato que le ofrecen a un personaje tan emblemático como es Constantine a la hora de incorporarle en el torbellino que es actualmente el NUDC y dar la importancia que merecen las historias que desarrolla en su propia serie para que no se conviertan en un mero compromiso con el que cubrir el expediente entre megaevento y megaevento en el que pretendan involucrar a un personaje al que aparentemente pretenden sobreexplotar. Sinceramente, ni la trayectoría del personaje ni los fieles seguidores que la han hecho posible se lo merecen.