miércoles, 26 de diciembre de 2012

“Capitán América y Bucky”, de Ed Brubaker, James Asmus, Marc Andreyko, Chris Samnee y Francesco Francavilla.




Dispuestos siempre a exprimir al máximo al personal mediante las más rocambolescas fórmulas de marketing, resulta que los editores Marvel decidieron dar dos tazas hace unos años a los seguidores del Capi reiniciando la numeración de la serie regular a raíz del horror de “Miedo Encarnado” cuando apenas unos meses antes habían recuperado la numeración original para poder celebrar el redondo número 600 que salía de la suma de todos los volúmenes anteriormente publicados. Esta vez, no contentos con reiniciar la serie, paralelamente continuaron con la numeración original por este lado con estos  ocho números – del 620 al 628, numerados por si alguien todavía le interesa eso de la numeración-  que acaba de publicar Panini en un apañado volumen.
El primer arco argumental de seis números guionizado por Brubaker junto a Marc Andreyko es el que quizás tenga más interés para los seguidores hardcore del Capi ya que en esta historia Brubaker ofrece más detalles en torno a los orígenes de Bucky antes de convertirse en el compañero del Capi. De este modo, Brubaker da a conocer a la familia de Bucky antes de quedarse huérfano y señala la existencia de una hermana. El conjunto de la historia ideada por Brubaker y Andreyko es bastante convencional y se aviene a fórmulas que Bru ha usado en múltiples ocasiones construyendo la autobiografía del personaje pero está resuelta con eficacia y la gracia de ser el propio Bucky  el que desgrana sus recuerdos durante la II Guerra Mundial y sus primeros pasos como Soldado de Invierno. A la entretenida historia, un eficacísimo Chris Samnee le saca todo el partido demostrando ser un excelente dibujante retro con un estilo que recuerda a los Lark y Epting con los que tan a gusto se siente Bru.

El segundo arco en el que Brubaker se apoya en el desarrollo del guión en James Asmus, a pesar de su ambición resulta bastante errada y confusa. Partiendo de una idea de Brubaker, Asmus construye una trama que gira en torno al poco (re) conocido Bucky de los años cincuenta quién ya envejecido y débil ha de aliarse con el Capi (Steve Rogers) y la Antorcha Humana Original para detener a un villano de su época en mallas. La historia podría haber dado bastante más de sí con un desarrollo menos errático y confuso como el que imprime Asmus al que se le nota bastante perdido en la colaboración con Brubaker y al no ser capaz de dar el tratamiento adecuado a los personajes que maneja, especialmente a Fred Davis, el Bucky de los años cincuenta ni desarrollar con claridad una trama llena de lagunas. Tampoco ayuda demasiado el trabajo gráfico de Francesco Francavilla, un dibujante con un estilo minimalista y elegante  poco adecuado para el género superheroico que usa una gama de colores chillones bastante desagradable a la vista y da la sensación de estar tan perdido como Asmus con este encargo.

En fin “Capitán América y Bucky” es un tomo que da claramente una de cal y una de arena, sin demasiado interés salvo que se sea un incondicional a las andanzas del Capitán América. Avisados quedáis.