lunes, 12 de diciembre de 2011

“Runaways: Orgullo y Alegría”, de Brian K. Vaughan y Adrian Alphona.



Panini, en su colección Extra Superhéroes, acaba de publicar en un único volumen los dieciochos números del primer volumen de “Runaways”, el cómic de superhéroes que dio a conocer a Brian K. Vaughan al gran público y que a día de hoy y, vista su producción posterior, sigue siendo uno de los mejores.


Runaways” es una historia que se sitúa en los márgenes del Universo Marvel y narra las aventuras de un grupo de adolescentes que de la noche a la mañana descubren que sus padres conforman una alianza de supervillanos secreta conocida como El Orgullo que realizan sangrientos sacrificios a los Gibborim, gigantes con ecos bíblicos más malos que la quina. Horrorizados, los chicos se escapan de casa y, mientras son perseguidos por los papás que tienen grandes planes para ellos, intentan que alguien les haga caso mientras descubren sus nuevas habilidades.



El primer volumen de “Runaways” conforma un arco cerrado, por lo que a pesar de la posterior continuidad de la serie puede leerse con total independencia. Vaughan construye, pese a quién pese, un tebeo de superhéroes entretenido, fresco e inteligente que agradará a un público variado que va desde el chaval que busca un tebeo con unos héroes jóvenes con los que identificarse hasta el lector veterano que aprecie el trasfondo tras la metáfora que encierra un acertado estudio en torno a las problemáticas de la adolescencia y las relaciones paternofiliales. Sin los resabios que lastran en ocasiones Y, El Último Hombre” o “Ex Machina”, Vaughan construye unos personajes entrañables, a los que aporta su innegable talento para los diálogos sin caer en pedanterías haciendo que las inteligentes referencias verdaderamente se inserten en la historia principal sin resultar forzadas.



En el aspecto gráfico, sorprende el dibujo del canadiense Adrian Alphona alejado de la espectacularidad vacua de los superhéroes actuales y más cercano al amerimanga más amable o directamente al Shojo japonés (cosa que no resulta extraña teniendo en cuenta que la serie se inscribió en Tsunami, una línea experimental de Marvel que buscaba atraer chicas al género). A pesar de ello, Alphona se muestra como un excelente narrador que da el tono adecuado a la serie en todo momento consiguiendo que sus personajes –especialmente el elenco de protagonistas- derrochen humanidad y resulten cercanos al lector y resolver con originalidad los momentos más “superheroicos” de la serie. Además, las portadas de Jo Chen son muy chulas.



Runaways” es el mejor tebeo de adolescentes con poderes desde la Kitty Pryde y “Los Nuevos Mutantes” de Claremont. Ya tocaba.