sábado, 31 de julio de 2010

“Zoo-Las Aventuras de Tristán Karma”, de J.M. Beroy.

Sigo repasando tebeos antiguos y le ha tocado turno a “Zoo-Las aventuras de Tristán Karma”, álbum editado hace ya muchos añitos por Norma Editorial recopilando las aventuras protagonizadas por Tristán Karma aparecidas en la revista “Cimoc” y que merecería una reedición similar a la que hace poco ha disfrutado otra obra del mismo autor “Versus”.

Tristán Karma se desenvuelve en un mundo futurista peculiar de línea clara en el que se convierte en testigo mudo –el personaje no habla- de originales aventuras en las que un Beroy en solitario e inspirado mezcla distintos elementos de ecologismo atemperado, cinematofagia, ciencia ficción y terror.

Historias protagonizadas por panteras que se convierten en mujeres cuando pierden su suave abrigo e historias de científicos que descubren cómo comunicarse con las ballenas a través de oscuras leyendas vikingas, leyendas urbanas de desperdicios tóxicos abandonados que provocan terribles mutaciones y representaciones de titiritero sobre las que sobrevuela el pájaro de la muerte.

Beroy se mueve como un pez en el agua en este ecléctico álbum en el que mezcla todo tipo de referencias y lugares con habilidad y que hunden sus raíces en la fascinación por películas como “La Mujer Pantera” de Jacques Tourneaur o los entrañables títulos de Serie B norteamericana de los Cincuenta con sus insectos gigantes mutados por la radioactividad.

Precisamente, al igual que el cine de Tourneur, el dibujo de Beroy sintetiza muchas de sus características con un marcado gusto por la concisión narrativa centrándose en los hechos principales y en la expresividad y vitalismo con que retrata a los personajes desarrollando unas historias fluidas, vistosas y llenas de matices.

Beroy en este álbum muestra su conocimiento de grandes autores de la línea clara, como Chaland, o su compañero de generación Daniel Torres con su “Roco Vargas pero Beroy es capaz de no emular a nadie a la hora de ambientar su propio mundo retro y futurista en el que la ambientación y el personaje protagonista, Tristán Karma, mero testigo u oyente de las historias en las que no tiene una participación directa, no es más que una excusa para dar hilazón al conjunto de las seis historias fantásticas que recoge el álbum y experimentar con nuevos estilos y matices logrando resultados más plásticos y fantasiosos como en la aventura de el cuervo.

En definitiva, la relectura de “Zoo-Las aventuras de Tristán Karma" sigue siendo tan agradable como hace años y su vigencia se mantiene tan intacta como en el momento de su primera publicación en revista. Esperemos que merced a una pronta reedición estas historias no se pierdan y continúen siendo plenamente accesibles a nuevos lectores o que Beroy decida darle una continuación pasados los años (aunque leyendo sobre sus malas experiencias pasadas quizás no le apetezca). Ojalá se anime porque estoy seguro que Beroy tiene todavía mucho que ofrecernos.

Otros tebeos de J.M Beroy comentados en El lector impaciente:

“Versus”.

viernes, 30 de julio de 2010

Primer Trailer de “Thor”, de Kenneth Branagh.


A través de Man of Bronze llego aquí donde todavía puede verse un extenso trailer que no deja nada a la imaginación, la verdad… Conclusiones: que pinta bastante bien, todos los detalles muy cuidados y la ambientación de Asgard no queda tan futurista como se veía en las fotos.

Lo reconozco, le tengo muchas ganas a esta peli…

Byrne ya no quiere a Lobezno.





Sanderson: Si actualmente guionizases a Lobezno, ¿volverías a hacer que tuviese ese temperamento imprevisible?



Byrne: ¡Por supuesto! Probablemente no podría hacerlo hoy en día, porque como ya sabes, intento someterme a las reglas. Y si los personajes se han alejado demasiado de la idea que tenía sobre ellos o de cómo deberían ser, tiendo a evitar el tener que hacerlos. Así que como Lobezno y el resto de X-Men realmente están bastante alejados de esos personajes que yo conocía, probablemente ni los cogería, aunque tuviese la opción de hacerlo.



(Frog2000 acaba de publicar la segunda parte (de 3) de su traducción de una extensa entrevista realizada en 2004 por Peter Sanderson a John Byrne y Chris Claremont y que podéis leer aquí y aquí. No tiene desperdicio).

“Hicksville”, de Dylan Horrocks.




La Literatura está llena de localidades imaginados por su autor que trascienden las limitaciones de la obra en que aparecieron y adquieren una entidad universal hasta ser confundidos por muchos casi con sitios con una localización geográfica real. Desde Baratalia hasta Utopía, pasando por Macondo, Región, Yoknapatawpha, Shangri-La, o Walden Dos, la Literatura es fecunda en crear estos rincones imaginarios, pero el Cómic no se ha quedado atrás y ahí están rincones tan sugerentes a los que retirarse en vacaciones como Coconino, Attilan o Palomar, lugares que merece la pena descubrir y a los que se une el que da título a la historia de Dylan Horrocks editada hace ya unos años por De Ponent y recientemente reeditada por Astiberri en una cuidada edición que incluye una nueva introducción del autor, "Hicksville".

Indagando acerca de los oscuros orígenes de Dick Burger, la mayor estrella mundial de la industria del cómic de los últimos años para escribir su biografía, Leonard Batts, crítico de cómics, llega hasta su lugar de nacimiento Hicksville, un pueblecito aislado en la inmensidad de Nueva Zelanda aparentemente tan tranquilo y aburrido como cualquier otro pueblecito aislado de la inmensidad de Nueva Zelanda. Sin embargo, nuestro protagonista pronto descubrirá que Hicksville tiene sorprendentes peculiaridades, como que en ese pequeño lugar todo el mundo ama, lee y es aficionado a los tebeos hasta límites insospechados y que, además, los extravagantes lugareños no parecen sentir ninguna simpatía hacia Burger. Poco a poco, conforme va conociendo más profundamente a los peculiares habitantes de Hicksville y sus historias, Batts irá conociendo los motivos de la animadversión del pueblo hacia su hijo más famoso y los sorprendentes secretos que en él se encierran.Para mí, “Hicksville” es ante todo una toma de posicionamientos. La del neozelandés Dylan Horrocks frente a la industria del cómic en la que se antepone el mero beneficio económico a la libertad creativa y una metáfora de los peligros que corre cualquier autor de traicionarse a sí mismo en pos del éxito a cualquier precio hasta el punto de perder la conexión con la realidad y la propia identidad. Horrocks tiene un mensaje moralizante que mostrar y lo hace con pasión, determinación y sensibilidad reinventando parte de la historia del medio a partir de experiencias que no se le escaparán al iniciado y reivindicando el sencillo placer esencial del mero disfrute del proceso creativo en el hecho de compartirlo con los demás. Horrocks centra todas las bondades de su mensaje en un pueblo perdido de una encrucijada imaginada Hicksville, una localidad con ecos borgianos, en la que todos sus habitantes –menos uno- son buenas personas, disfrutan de los tebeos y son guardianes de la quintaesencia de la creatividad obviando los cantos de sirena y las obligaciones del mundo material, convirtiéndose así para el lector aficionado a los cómics en una especie de paraíso terrenal al que le gustaría irse de vacaciones.


"Hicksville" es un gran tebeo en el que el autor demuestra su amor y conocimiento de parte de la historia del mismo a través de una narración fluida y organizada a lo largo de diez capítulos en la que experimenta con notable habilidad con la narración incorporando distintas historias dentro del hilo de la trama principal de un modo único y consustancial al medio a través de los distintos tebeos que aparecen dentro del propio tebeo en un planteamiento de “tebeos dentro del tebeo”que ya utilizase el propio Moore en “Watchmen”. Más allá de que Horrocks reinvente desde planteamientos maniqueos atemperados con ironía y humor la historia del medio para otorgar a su tebeo un carácter fabulador heredado directamente del Realismo Mágico exento de zonas grises en el que los buenos son muy buenos y los malos malísimos con el único fin de provocar la fascinación en el lector, más acusadamente conforme mejor conozca las referencias históricas manejadas por el autor. Horrocks introduce subtramas secundarias a través de los distintos personajes que resultan más adultas e interesantes que la misma trama principal, historias de amor y desamor, de inseguridades y miedos, que son la razón de ser real de la existencia y que creo que con buen criterio simplemente Horrocks sólo se limita a plantear como un medio de ambientar la historia dejando su conclusión en suspenso.Horrocks tiene múltiples influencias pero más allá de la ya mencionada a Borgés es patente también la influencia de los Jaime y Beto Hernández aun cuando Horrocks, que no es un dibujante brillante, pero sí un magnífico narrador conocedor de los distintos ritmos de los géneros de la historieta desarrollando una historia-compendio poderosa en evocaciones y comprensible y accesible aun para aquellos que no sean expertos en la historia del cómics.


"Hicksville” es un gran tebeo y una reivindicación del medio como pocas se han realizado en los últimos años, pero también es una pequeña gran historia sobre las cosas que dan sentido a la vida y creo que realmente es ahí donde radica su verdadero valor atemporal. Yo no me la perdería porque es uno de los mejores tebeos del nuevo siglo. Hacedme caso.

miércoles, 28 de julio de 2010

Primer trailer de “Sucker Punch”, lo nuevo de Zack Snyder.



Zack Snyder sigue empeñado en rizar el rizo y afrontar nuevos retos en elcine de entretenimeinto con su nueva película para 2011, “Sucker Punch”, una historia en los límites de lo real y lo imaginario en la que caben dragones, nazis y chicas ninjas con total naturalidad. El trailer despierta el interés, la verdad, aunque como Snyder no se contenga -y a este chico no le gusta contenerse- puede ser la ida de olla más grande del año.

“Espera…”, de Jason.

Uno de los protagonistas de este cómic de Jason le pregunta al otro “¿Qué hora es?”, recibiendo por respuesta “Verano”. Quizás no os acordéis pero este diálogo refleja con una perfección absoluta el lento trasnscurrir del tiempo durante los veranos de la infancia en la que el tiempo parecía transcurrir más lentamente y la mayor libertad no necesariamente suponía más diversión durante las largas tardes de agosto.

Ese es el punto de partida de este excelente cómic del noruego Jason publicado ya hace unos años por su editorial habitual en España, Astiberri. Jason retrata a la perfección el mundo de la infancia aunque este acercamiento no sea más que la excusa para reflejar una historia adulta mucho más cruel, dura y amarga, la de dos amigos que durante el verano se dedican a vivir todo tipo de experiencias infantiles – juegos, travesuras, primeros amores, líos con abusones…-, experiencias y situaciones que a raíz de un hecho traumático marcarán de por vida a uno de ellos.

Jason juega a la ambigüedad en esta historia del 2003 en la que a través de un efectivo uso del blanco y negro y la composición de página 3x2 ya mostraba un talento fuera de lo común como narrador gráfico para dirigir al lector a través de la historia mediante una composición neutra y fría de la que cada lector ha de sacar sus propias conclusiones y construir su historia en una obra organizada en dos partes muy diferenciadas que se desarrollan en lapsos temporales distintos a partir del punto de inflexión que marca una tragedia que marca la vida del protagonista.

Jason en esta historia, como en la mayoría de su obra,no prescinde de referentes cinematográficos, en este caso la manida “Cuenta Conmigo” a la hora de reflejar la amistad infantil pero se aleja de la tópica y agradecida mirada nostálgica que puede encontrarse en otros cómics con un similar punto de partida como el “Buen Tiempo” de Joe Matt marcada por la activación en el lector de experiencias comunes para mostrar por un lado un reflejo poco idealizado de la infancia, de sus miedos y su ingenuidad, sus crueldades y sus franquezas, inspirado en un maestro que dedicó toda su vida a retratarlas, el gran Schultz y su “Peanuts”; y, por otro, centrarse en la historia adulta de soledad y desarraigo que le interesa mostrar, la del adulto traumatizado y solitario incapaz de superar las consecuencias de sus actos de juventud.

Jason mantiene un frío distanciamiento respecto a sus personajes asumiendo la posición de narrador neutral y distante para que sea cada lector el encargado de dotar a la historia del sentimiento y los matices que más le inspiren – simpatía, compasión, tristeza, lástima, una mezcla incierta…- para rellenar los huecos entre las viñetas y las pausas sabiamente intercaladas para completar los significados de una historia profundamente humana que difíclmente deja indiferente.

André Geerts (1955-2010)


Por EntreCómics me entero de la prematura muerte del autor belga André Geerts, autor especializados en cómics de temática infantil y conocido fundamentalmente por su serie “El Pequeño Jojo” de la que Ediciones B publicara en España un álbum hace décadas y que ha llegado hasta los 17 títulos. Entre sus trabajos destacan también tebeos como “Jabert”, “Mademoiselle Louise”, “Monde Cruel!” o “Le Comissaire Martin”.

D.E.P.










martes, 27 de julio de 2010

“Flash: Renacimiento”, de Geoff Johns y Ethan Van Sciver.


Geoff Johns diseñó unos zapatos estupendos de la marca “Green Lantern”. A base de uso le encajaron perfectamente y lo mismo le valen ahora para irse a los bailes de salón que para salir por la montaña. Pero, a Johns no le gusta tener sólo un par de zapatos y en la Zapatería DC vio un modelo clásico de la firma Flash que, por su clase y elegancia, le ha gustado más que el que le ofrecieron en un primer momento y tras sacarlo de la caja en que se guardaba en “Flash: Renacimiento” se lo está probando para decidir si le encaja o no. Con esta historieta les he resumido la trayectoria de Johns y lo que está haciendo actualmente con, Barry Allen, el Flash de toda la vida que nos dejara hace muchos añitos en una de las muertes superheroicas más terribles, épicas y heroicas que los viejos del lugar tdavái recordamos merced a ese memorable tebeo que fue “Crisis en Tierras Infinitas” y que, año a año, Johns se empeña en deconstruir sus consecuencias en una huida hacia delante que no sabemos donde va a acabar.

En “Flash: Renacimiento”, el resucitado Barry Allen se enfrenta a un mundo muy cambiado tras todos los años que él se pasó prisionero de la Fuerza de la Velocidad y se ha vuelto más taciturno y serio de lo que ya era. A pesar de los esfuerzos de sus amigos el Flash de toda la vida no sabe si será capaz de encajar de nuevo en este nuevo mundo pero no tendrá tiempo para pararse a averiguarlo cuando descubra que su mero contacto es capaz de provocar la muerte a todos los corredores que se nutren de la Fuerza de la Velocidad. Aterrorizado, Allen intentará volver a su exilio para descubrir que el que está detrás de todas sus desgracias es su némesis oscura, su mayor amenaza que una vez más pretende privarle de lo que más quiere. ¿Será capaz Barry Allen ayudado por sus amigos de impedirlo? Tendréis que leeros el tebeo para averiguarlo.

Lo primero de todo, “Flash Renacimiento” es un tebeo exigente. Johns se mueve con la Fuerza de la Velocidad por la historia de Flash de los últimos cincuenta años y no espera a nadie, por lo que recomiendo un repaso exhaustivo del material que se ha ido publicando últimamente (Flash, JSA, Crisis varias, etc.…) porque si alguien pensaba subirse a la serie aprovechando la reaparición de Allen puede sentirse superado dado el ritmo frenético con el que Johns narra esta aventura en la que no sólo vuelve a situar a Allen en el centro del Universo DC con vistas a que asuma un rol protagonista en “La noche más oscura” (ya hablaremos de ella cuando acabe) sino que incorpora nuevas situaciones e introduce múltiples posibilidades a explorar y desarrollar en el futuro en la serie del personaje. ¿Merece entonces la pena este “Flash Renacimiento”? Como aventura cerrada y unitaria no pasa de entretenido y su desarrollo es un tanto confuso abusando de nuevo Johns de la explotación reiterada de situaciones tópicas –(¿Por qué a Johns le gustan tanto las fiestas?) y dejando algunas –quizás demasiadas- situaciones en el aire que pueden llevar al lector ocasional ocasional a sentirse estafado, aunque seguramente el aficionado de Flash no se sentirá decepcionado sino más bien todo lo contrario, ya que si el guionista tiene ya planificado (como se presupone a poco que se conozca su carrera) todo lo que sugiere en este tebeo va a tener aventuras de Flash y a Barry Allen para rato.

Con la trama de Johns en suspenso durante años a la espera de saber si la considero un bluff o un hito de los tebeos de Flash sólo un escalón inferior a “El Flash de dos mundos” lo que realmente me ha gustado de este tebeo y justifica su compra es el dibujo de Van Sciver, un dibujante ideal para el género superheroico porque es un autor con una personalidad propia pero que tiene cosas de grandes del género como George Perez, Neal Adams o John Byrne, capaz de ofrecer un tebeo espectacular sin renunciar al orden y la limpieza y sin que sus composiciones parezcan desordenadas ni deformes. Un dibujante al que no hay que perder para nada la pista y que en esta obra pone orden en el complicado embolado en que lo mete Johns.

En fin, “Flash: Renacimiento” es un tebeo irregular que plantea muchas más incógnitas que preguntas responde, dejando la puerta abierta a que Johns nos sorprenda en el futuro. Seguro que nos divertiremos averiguándolo. La edición de Planeta me ha gustado bastante, con un estupendo artículo de Toni Boix sobre los orígenes de Flash, aunque yo hubiera incluido un glosario de personajes para que el neófito no se perdiera en la marabunta.

Antonio Gamero (1934-2010)

Todos sabíamos quién era pero a muchos se les olvidaba el nombre de este inconfundible actor aunque su voz particular, su socarronería y su presencia en pantalla siempre daban empaque y personalidad a las películas en las que participó.

Desaparece otro de los grandes secundarios del cine español perteneciente a una raza que lamentablemente está en extinción. Disfrutemos de sus películas pero no olvidemos su nombre ni el de tantos otros.

D.E.P.

lunes, 26 de julio de 2010

“Hom”, de Carlos Giménez.


Pensaba que ya habíamos hablado por aquí sobre este cómic de Carlos Giménez pero va a resultar que no. Y como desde los comentarios alguien me había pedido opinión y nunca da pereza releer a Giménez ahí va mi comentrario.

“Hom”, de Carlos Giménez –como ya refleja desde la portada la edición de Glénat es una adaptación de una novela de Brian Aldiss titulada de “En el lento morir de la Tierra” que en posteriores ediciones se tituló, erróneamente para mi gusto, “Invernáculo” . Este dato, que podría ser importante si estuvieramos ante otro autor y conferirle un carácter tributario del original, sólo cobra un interés anecdótico en el caso de este cómic, porque Giménez le da un nuevo enfoque para construir a través de las aventuras del protagonista, el abnegado Hom, una metáfora sobre el poder, la injusticia y la libertad, convirtiéndose quizás en el mejor resumen del ideario de su autor y su posicionamiento vital, cobrando -además- todo su significado si nos retrotraemos al período de su primera publicación (principios de los setenta) que conllevó que la obra fuera censurada y tuviera que ser publicada por primera vez en Italia en 1974 para ser editada por primera vez en España en 1977.

Hom” nos cuenta las andanzas del personaje que da título al álbum. Un guerrero de una Tierra futura y crepuscular devastada a causa de un cataclismo desconocido y en la que los pocos humanos sobrevivientes han vuelto a la barbarie primitiva y conviven con distintos tipos de mutantes. Hom vaga por un inhóspito vergel tras huir de las injusticias que tienen lugar en su tribu para acabar convertido en el huésped de un parásito que se adosa a su cabeza y le promete alimento, poder e inteligencia a cambio de su fuerza. De este modo, dominado por el parásito, realizará toda serie de tropelías a las que es incapaz de resistirse y llevado por las ansias de dominación de su captor hasta dar con El Gran Yo, un megalómano mutante anfibio incapaz de andar y que viaja con su séquito hacia el mar siguiendo su propio ciclo biológico. Cuando el portador de El Gran Yo muere reventado, a instancias de su párásito, Hom cargará con él y al tiempo que inician una frenética huida de la amenaza de los aulladores y se ve obligado a actuar de nuevo contra su voluntad irá adquiriendo conciencia de la injusticia del mundo que le rodea en el que la única ley que prevalece es la de la jungla en la que el más grande se come al chico.


Hom” es una obra polisémica que adquiere un mayor significado teniendo en cuenta el momento histórico de su gestación en los últimos coletazos del franquismo pero que no por ello ha perdido vigor su mensaje dado su carácter metafórico y filosófico en lo que es un profundo estudio del comportamiento humano.

Giménez, sin renunciar a la ambientación y la narración de las aventuras de los protagonistas en su viajar, que constituyen el punto fuerte de la novela/relatos de Aldiss y que permiten una lectura superficial de género entretenida y vibrante para el lector que no busque nada más, centra su interés en el estudio de las relaciones de los personajes para describir las distintas formas de dominación a través de sus relaciones en un relato dramático, oscuro y pesimista, en el que por un lado se encuentran los dominados (el protagonista y los hombres planta cuyas posturas se convierten en metáforas de los comportamientos más habituales entre la población) frente a los explotadores encarnados por El Gran Yo y el parásito trasuntos de los poderosos y manipuladores que aprovechan el trabajo de los demás en su propio beneficio.

Frente a ese panorama de injusticia y crueldad, Giménez se rebela a través de la toma de conciencia del protagonista de la necesidad de colaboración de los débiles frente al atropello de los fuertes aunque el autor no se engaña de lo utópico de sus soluciones ni el carácter quasibiológico del ciclo, dominador/dominado, ofreciendo finamente un final abierto con un futuro del protagonista –Hom, el Hombre, España…- lleno de posibilidades.

Es muy difícil trasladar tantas ideas y tanta carga filosófica (el que quiera ver en “Hom” un álbum esencialmente político se queda corto) y a tantos niveles como lo hace Giménez en esta historia magistral en la que lleva al extremo las posibilidades del medio con una concisión´ejemplar. En esta obra, Giménez se muestra especialmente minucioso en el reflejo de las facciones de los distintos personajes logrando soberbias caracterizaciones psicológicas marcadas por el conflicto o la maldad y es capaz de introducir no sólo una sino varias historias –largas, el flashback en que se nos narra la huida de Hom y su compañera de su tribu, cortas, las relaciones biológicas entre las distintas especies vegetales y animales que habitan la Tierra crepuscular en que se desarrolla la historia- dentro del caudal de la trama principal que potencian y retroalimentan su carga emotiva y dramática así como su ideario sin que por ello decaiga el ritmo ni la intensidad de la narración en una historia cargada de momentos dramáticos atemperados con elegantes transiciones no exentas de contenidos , logrando un resultado unitario de un modo que ni el propio Aldiss fue capaz de conseguir en la novela que sirve de punto de partida a Giménez (ideada en un principio como un conjunto de relatos).

En definitiva, “Hom es otra de las grandes obras de ese gran maestro del Noveno Arte que es Carlos Giménez y en mi opinión su obra maestra dentro del género de la ciencia ficción. Una obra clásica cuya moraleja, más allá de estar adscrita a su tiempo, lo supera y mantiene su vigor hacia el futuro como un aviso a navegantes (y lectores) de los peligros que encierra el lado oscuro de la naturaleza humana.

Avisados, quedamos, el maestro Giménez, dixit.


Primer trailer de “Los Muertos Vivientes”, la serie.

A través de El Cuarto Mundo me entero que en la Comic-Con de San Diego se han podido ver las primeras imágenes de la esperada adaptación del cómic de Kirkman, Adlard y Moore, dirigida por Frank Darabont.

A pesar de la escasa calidad de las imágenes creo que la cosa promete….mucho.

Ojo de Halcón, ¿Ojo de Halcón?¡Ojo de Halcón!.

Este muchachote ha confirmado en la Comicon de San Diego que va a interpretar a Ojo de Halcón en la nueva película de “Los Vengadores” que va a escribir y dirigir Joss Whedom. En “28 Semanas Después” lo hizo bien aunque con este tipo de declaraciones me da que no sabe muy bien todavía donde se está metiendo:

También le preguntaron a Renner si había empezado a leer cómics de Ojo de Halcón por si al final le daban el papel, con el fin de conocer un poco más el personaje y adentrarse en su historia.

Sí, pero va a ser modernizado, no va a ser el chico con la gran máscara violeta, no va a ser un tío en mallas. Va a ser un chico con camiseta y gafas de sol. Va a ser mucho más moderno y yo voy a decir, 'es una versión más guay', nada de ese traje extraño que suele llevar. No creo que vayan a seguir ese camino.”
(Espacio Marvelita).

¿Qué pasa? ¿Ojo de Halcón no es “guay”? Anda, vete por ahí y léete unos cuantos tebeos…







domingo, 25 de julio de 2010

Primer trailer de “Drive Angry 3D” o Nicholas no para…

Nicholas no para y acumula y acumula papeles –le da igual si es protagonista o secundario- en varias películas por año.


Aquí le tenemos en su nuevo proyecto “Drive Angry 3D " de Patrick Laussier, una de tíos que se escapan del infierno para salvar a sus hijitas de cultos malditos. Persecuciones, tiros y coches…Vamos, lo normal.


A este paso Cage se pone al día con el Fisco en dos días, se compra otro castillo y le queda calderilla para hacerse con los originales de Superman que pululen por el mercado.

¡Tres hurras por Cage!

sábado, 24 de julio de 2010

“The House of Mystery: Neal Adams”.


Segunda entrega de los monográficos que está publicando Planeta de los grandes autores que contribuyeron a dar lustre a la mítica cabecera de terror de DC. Si con la anterior entrega dedicada a Wrightson ya disfrutamos con esta dedicada al gran Neal Adams el goce es mayor porque a pesar que la edición no es la mejor y que Adams sólo realizó tres historias y poco más de una treintena de portadas en la serie entre 1969 y 1970 queda patente que nos encontramos ante un verdadero maestro a pesar de tratarse de un trabajo de juventud (están por venir todas sus grandes obras).



Si las tres historias que componen el volumen no han perdido vigor – completa el volumen aparte de las portadas mencionadas una última historia que Adams realizó el año pasado para la nueva etapa de la serie- es precisamente por la labor gráfica de un autor único. Cambios de perspectiva y escorzos característicos y elegantes soluciones gráficas en la composición (sólo la solución con la que ilustra la huida del niño por el bosque en “El Premio” merece la lectura del tebeo) que quedaban reforzados con un acabado a lápiz que potenciaba la ambientación fantasmagórica – efecto que se pierde en la edición de Planeta - que convierten estas historias sobre niños que juegan al scrabble con el demonio en barrocas camas góticas, abnegadas esposas de marineros de Nueva Inglaterra que maldicen a sus ambiciosos maridos con no poder llegar nunca a puerto y niñitas que viven a medio camino entre la realidad y la fantasía– en una auténtica gozada para cualquier aficionado al cómic.




Hasta aquí lo positivo. Vamos con lo negativo. En el segundo volumen de esta serie se confirma lo inadecuado de una edición de batalla que queda todavía más en evidencia si tenemos en cuenta que la misma editorial en una esquizofrénica decisión está publicando “Creepy” en una edición para coleccionistas con una buena reproducción. El hecho que se realice una edición popular que recoge material inaccesible (las historias de Adams en “House of Mystery” sólo habían sido recopiladas anteriormente en España en un “Dossier Negro” inecontrable) no disculpa una reproducción que no hace justicia al artista ni la ausencia de color en las portadas en un tomo en el que la mitad de su contenido son precisamente portadas. Y, por otro lado, tampoco es entendible que incorporen una serie de estupendos artículos realizados por Alberto Garcia y luego no se aclaren incorporen datos tan evidentes en los créditos aclarando quién es el guionista de cada una de ellas (ya aviso que en las historia en las que no pone nada –“El Premio”- el guionista es el propio Adams y en “Pesadilla” el guionista es Jack Oleck).Los entintadores son el propio Adams, Joe Orlando y Dick Giordano.




En definitiva, los que queramos disfrutar de la pléyade de estupendos dibujantes que pasaron por "The House of Mystery" tendremos que acoquinar con una edición de batalla que no les hace justicia simplemente porque no hay otra (o aprovechar directamente la de Showcase The House of Mystery en yanquilandia si manejan el inglés y el previews).Creo que podría haberse hecho mejor.

viernes, 23 de julio de 2010

Los Muertos Vivientes, ¿Los Muertos Vivientes? ¡¡Los Muertos Vivientes!!

Hasta ahora no he querido comentar nada pero ya el zombi que hay en mí no se aguanta más tras ver el cartel promocional de la serie televisiva que se está preparando del cómic de Robert Kirkman y Charlie Adlard.

Hay que destacar que tanto los vivos como los muertos trasladan perfectamente la estética de Adlard y Moore. Si los guiones estén a la altura de los de Kirkman tendremos zombis televisivos para rato.