lunes, 11 de junio de 2007

“Piratas del Caribe 3: En el fin del mundo”



Por fin pude ver la tercera parte de la trilogía más exitosa de la década, con el permiso de “El señor de los Anillos” de Peter Jackson. Y, lo cierto, es que no salí defraudado porque “Piratas del Caribe” ofrece aquello que promete: entretenimiento para todos los públicos durante dos horas y media.
¿Hay alguna novedad sorprendente en “Piratas del Caribe 3: En el fin del mundo”? No demasiadas, simplemente se trata de finiquitar la historia allí donde quedó anclada tras la segunda entrega. Y, en ese punto, la película cumple sobradamente con un final espectacular y agridulce que hasta cierto punto sorprende en una película de estas características. Sin embargo, hasta llegar a ese momento la historia avanza deshilvanada e inconexa quizás debido a que el director Gore Bervinski (“Un ratoncito duro de roer”) pretende contarnos muchas cosas al tiempo que reparte minutos entre su estelar reparto y amortiza su grueso presupuesto lo que redunda en la trama principal, una trama que tiene paralelismos sonrojantes con “El retorno del Jedi” (sí, no se rían) y cuyo triángulo amoroso se resuelve sobre la marcha de una manera graciosa y dramática al tiempo (quizás lo mejor de la historia sea este punto).
Esta tercera parte se sustenta en los mismos elementos que ya hicieron un éxito de las dos anteriores, los espectaculares efectos especiales y la sorprendente “vis comica” de Johnny Depp (“Eduardo Manostijeras”, “Ed Wood”) que ha encontrado en el histriónico Jack Sparrow al personaje que le afiance ante el gran público como una superestrella. Depp, recuerda por momentos a los grandes del cine mudo con sus muecas y gestos, y es el verdadero motor de una película hecha a su medida. Del resto del trío protagonista, me ha sorprendido gratamente una Keira Knightley (“Quiero ser como Beckham”) que asume sin complejos la labor de dar la réplica a Depp en muchos momentos en el papel de una Elisabeth Swann que gana peso en la trama en comparación con los episodios anteriores (además, está más guapa) mientras que el guapo Orlando Bloom (”El reino de los cielos”) hace lo que mejor sabe hacer, ejercer de guapo y aguantar mal que bien su duelo interpretativo con Depp en una batalla que tenía perdida de antemano. Del resto de reparto, destacar a los siempre eficaces Geofrrey Rush y Chow Yun-Fat, actores de prestigio y con el oficio suficiente para interpretar sus papeles con decoro e ingresar probablemente un buen pellizco por ello.
Pues nada, ya saben si no tienen nada mejor que hacer una tarde cualquiera y todavía la siguen echando acérquense a ver “Piratas del Caribe 3” que por lo menos les hará pasar un rato entretenidos. No esperen mucho más.